
El uso de un Sistema de Retención Infantil (SRI) en buen estado, adecuado para la estatura, peso, edad y desarrollo óseo/muscular del infante, que está correctamente instalado y utilizado, puede reducir entre un 50% y un 80% las lesiones mortales y graves de bebés y niños ante un siniestro vial.
Fuente: Organización Mundial de la Salud (OMS)
Después de un siniestro vial moderado o grave*, puede que la silla de auto se vea intacta a simple vista, pero, no es posible garantizar que no tenga, por ejemplo: grietas internas, fisuras en su sistema de anclaje, quiebres en su arnés interno u otros.
En caso que la silla haya sufrido cualquier desperfecto, NO podrá cumplir adecuadamente su función protectora, si es que sufre un nuevo accidente, lo que podría implicar que en una segunda coalición el infante sufra lesiones mortales o graves. Es por ello que DEBE ser reemplazada por una nueva.
(*)¿Cómo saber si tu SRI sufrió un siniestro vial moderado o grave?
La National Highway Traffic Safety Administration de Estados Unidos (NHTSA) considera actualmente como “accidentes menores” aquellos que cumplen con TODOS los siguientes criterios:
- El vehículo pudo seguir circulando en forma autónoma desde el lugar del accidente.
- La puerta del vehículo más cercana a la silla de seguridad no sufrió daño alguno.
- Ninguno de los ocupantes del vehículo sufrió lesión alguna.
- Ninguno de los airbags del vehículo se activó.
- La silla de auto no tiene daños visibles.
Si el siniestro vial en el que se vió comprometido tu SRI, NO cumple al menos una de estas condiciones, entonces sufrió un siniestro vial moderado o grave y DEBE ser reemplazado.
